Cada semana, entregá,
Un laburo, una exigencia,
Entregá,
Como si esto fuera
Una carrera de ciencia,
O estuviera haciendo
El adoquinado.
Cada mes, me agarran los huevos,
Con una morsa, en cuotas,
A veces negocio el riñón
Para salvar las bolas.
En este reino de ciegos
Una morsa sin bolas es rey de talentos,
Y te las agarra con otra morsa
Para afanar-telos.
Su reino es un poemario
Donde se necesitan poetas malos
Para que así contraste uno,
Entre la mugre reinante
Para vanagloriarse en el carnaval
De las morsas ladri.
Por eso repite que…
*Se necesitan malos poetas.
Buenas personas, pero poetas malos.
Dos, cien, mil malos poetas
se necesitan más para que estallen
las diez mil flores del poema.
Y así podrá apretarle los huevos
A más intentos de artista
Dos, cien, mil intentos de artista
Que lo único que les estalla
Es el porro en la boca.
Y la creatividad, ay pobre,
Se pierde como los pétalos
Que dejan los artistas caer
En los inodoros, en los descartes,
Cuando la gorra, finalmente, llega.
Y así la morsa rey podrá
Darnos una palmadita en el trasero,
Un libro, unas palabras, unos aplausos plebeyos,
Todos los malos poetas estarán
Aplaudiendo el que brilla.
No todo lo que brilla es oro,
No todo lo que hiede es caca,
El paraíso prometido
Es como viajar a las pirámides.
A laburar como esclavo
Entre los malos poetas
Y los intentos de artista.
*(prestado para realizar la consigna)
No hay comentarios:
Publicar un comentario